miércoles, 3 de octubre de 2012

“Não importa quanto tempo passe, não importa onde eu esteja, não importa onde esteja você, abra os olhos pra dentro e ouça: o meu coração estará dizendo esta mesma prece de amor para o seu. Amor incondicional, exatamente como neste instante. Não importa o quanto a gente mude, o quanto a distância aparente nos afastar, isto que sinto por você, eu sei, não muda nunca mais.”

domingo, 30 de septiembre de 2012

No sé.

Ya no sé dónde vivís. Planeabas mudarte, irte a vivir solo. Ni sé dónde trabajás. Buscabas independizarte y no rendir cuentas a nadie. No sé si te recibiste, aunque siempre fuiste tan aplicado. Estoy segura de que tu tesis fue una de las mejores de la historia. No sé si lograste todo eso, pero aunque me duela no estar para verlo, espero que lo hayas alcanzado. No sé si hoy dormís agarrado de la mano de alguien más. No sé si me extrañás o pensás en mi. No sé cuándo voy a dejar de extrañarte y de pensar en vos. No sé dónde guardar los recuerdos para no perderlos y a la vez para no encontrarlos. No sé cómo hacer para saber de vos, si recurrir a tu mamá o a tu papá, o algún amigo, o mejor dejarlo así. No sé cómo deshacer todos esos proyectos juntos, cómo encontrarte para encontrarme, cómo hacerte entender que te sigo amando incluso más que antes. No sé cómo decirte que hubiera sido mejor apagar el celular antes de llegar a ésto, y no apagarlo ahora para perdernos.
Si te busco es porque con vos puedo ser yo, o una de las mejores versiones de mi misma, a veces. Si te doy mi amor me empeño a mi misma, y mi amor hace rato es todo tuyo. No voy a dejar que el orgullo me impida decirte "que seas feliz" aunque no sea yo la que te haga feliz. Perdón a vos y a mi, porque te fallé y me fallé, otra vez.
Te amo.



Qué ganas de que lo anterior nunca pase, qué ganas de que seamos felices, juntos.

lunes, 24 de septiembre de 2012


Ellos tienen razón esa felicidad
al menos con mayúscula no existe
ah pero si existiera con minúscula
seria semejante a nuestra breve presoledad.

Después de la alegría viene la soledad
después de la plenitud viene la soledad
después del amor viene la soledad.

Ya se que es una pobre deformación
pero lo cierto es que en ese durable
minuto uno se siente solo en el mundo.

Sin asideros, sin pretextos
sin abrazos, sin rencores
sin las cosas que unen o separan
y en es sola manera de estar solo
ni siquiera uno se apiada de uno mismo.

Los datos objetivos son como sigue.

Hay diez centímetros de silencio
entre tus manos y mis manos una
frontera de palabras no dichas
entre tus labios y mis labios
y algo que brilla así de triste
entre tus ojos y mis ojos claro
que la soledad no viene sola.

Si se mira por sobre el hombro mustio
de nuestras soledades se vera un
largo y compacto imposible un sencillo
respeto por terceros o cuartos
ese percance de ser buenagente.

Después de la alegría
Después de la plenitud
Después del amor
Viene la soledad.

Conforme pero
que vendrá después
de la soledad.

A veces no me siento tan solo
si imagino mejor dicho si se
que mas allá de mi soledad y de
la tuya otra vez estas vos
aunque sea preguntándote a solas
que vendrá después de la soledad.



Mario Benedetti
.

domingo, 23 de septiembre de 2012


Y se muy bien que no estarás.
No estarás en la calle
en el murmullo que brota de la noche
de los postes de alumbrado,
ni en el gesto de elegir el menú,
ni en la sonrisa que alivia los completos en los subtes
ni en los libros prestados,
ni en el hasta mañana.
No estarás en mis sueños,
en el destino original de mis palabras,
ni en una cifra telefónica estarás,
o en el color de un par de guantes
o una blusa.
Me enojaré
amor mío
sin que sea por ti,
y compraré bombones
pero no para ti,
me pararé en la esquina
a la que no vendrás
y diré las cosas que sé decir
y comeré las cosas que sé comer
y soñaré los sueños que se sueñan.
Y se muy bien que no estarás
ni aquí dentro de la cárcel donde te retengo,
ni allí afuera
en ese río de calles y de puentes.
No estarás para nada,
no serás mi recuerdo
y cuando piense en ti
pensaré un pensamiento
que oscuramente trata de acordarse de ti.
El futuro 

Julio Cortázar


Dime por favor donde no estás
en qué lugar puedo no ser tu ausencia
dónde puedo vivir sin recordarte,
y dónde recordar, sin que me duela.

Dime por favor en que vacío,
no está tu sombra llenando los centros;
dónde mi soledad es ella misma,
y no el sentir que tú te encuentras lejos.

Dime por favor por qué camino,
podré yo caminar, sin ser tu huella;
dónde podré correr no por buscarte,
y dónde descansar de mi tristeza.

Dime por favor cuál es la noche,
que no tiene el color de tu mirada;
cuál es el sol, que tiene luz tan solo,
y no la sensación de que me llamas.

Dime por favor donde hay un mar,
que no susurre a mis oídos tus palabras.

Dime por favor en qué rincón,
nadie podrá ver mi tristeza;
dime cuál es el hueco de mi almohada,
que no tiene apoyada tu cabeza.

Dime por favor cuál es la noche,
en que vendrás, para velar tu sueño;
que no puedo vivir, porque te extraño;
y que no puedo morir, porque te quiero.

(Atribuido a Borges. Autor: Gustavo Alejandro Castiñeiras. Nombre original: Poema de un Recuerdo)

sábado, 15 de septiembre de 2012

Me río como mamá y tengo el mal carácter de papá. Soy petisa y con algunos kilos de más, pero hay muchas otras cosas que también soy y tampoco quiero ser. Es temprano pero afuera hay un sol radiante, en cambio para mí, adentro mío, es un día casi gris.

domingo, 9 de septiembre de 2012

Espero curarme de ti en unos días. Debo dejar de fumarte, de beberte, de pensarte. Es posible. Siguiendo las prescripciones de la moral en turno. Me receto tiempo, abstinencia, soledad.
¿Te parece bien que te quiera nada más una semana? No es mucho, ni es poco, es bastante. En una semana se puede reunir todas las palabras de amor que se han pronunciado sobre la tierra y se les puede prender fuego. Te voy a calentar con esa hoguera del amor quemado. 
Y también el silencio. Porque las mejores palabras del amor están entre dos gentes que no se dicen nada. Hay que quemar también ese otro lenguaje lateral y subversivo del que ama. (Tú sabes cómo te digo que te quiero cuando digo: "qué calor hace", "dame agua", "¿sabes manejar?", "se hizo de noche"… Entre las gentes, a un lado de tus gentes y las mías, te he dicho "ya es tarde", y tú sabías que decía "te quiero"). Una semana más para reunir todo el amor del tiempo. Para dártelo. Para que hagas con él lo que quieras: guardarlo, acariciarlo, tirarlo a la basura. No sirve, es cierto. Sólo quiero una semana para entender las cosas. Porque esto es muy parecido a estar saliendo de un manicomio para entrar a un panteón”. Jaime Sabines.

miércoles, 25 de julio de 2012

Mi tesoro.

Siento calor. Un calor lindo, cálido, no quema. Me hace sentir bien. Veo tu sonrisa y me contagio, veo tus ojos y brillan los míos. Entro perfectamente en esos brazos que sólo buscan sostenerme cerca, y cuando eso sucede, me siento aún mejor.
Puedo sentir tus caricias y me dan escalofríos. Tiemblo y me acerco un poco más a vos, me besás la frente y se hace la paz. Esa sensación inmensa de tranquilidad, de armonía. Disfruto de mi respiración al compás de la tuya. Disfruto del amor.
Me despierto. Tengo miedo de que sólo haya sido un sueño, y lo fue. Doy la media vuelta en la cama y estás ahí, durmiendo a mi lado. Vuelvo a sentir tu calor, ese que me hace tan bien, y esta vez además me inunda tu perfume. Me acerco despacito tratando de no despertarte; te rozo, agarro la mano o te abrazo, de acuerdo a mi urgencia.
Vuelvo a dormir tranquila sabiendo que puedo soñar todo lo que quiera, al despertar serás mi realidad.

sábado, 14 de julio de 2012

Qué vanidad imaginar
que puedo darte todo, el amor y la dicha,
itinerarios, música, juguetes.
Es cierto que es así:
todo lo mío te lo doy, es cierto,
pero todo lo mío no te basta
como a mí no me basta que me des
todo lo tuyo.

Por eso no seremos nunca
la pareja perfecta, la tarjeta postal,
si no somos capaces de aceptar
que sólo en la aritmética
el dos nace del uno más el uno.

Por ahí un papelito
que solamente dice:

Siempre fuiste mi espejo,
quiero decir que para verme tenía que mirarte.

miércoles, 11 de julio de 2012

Te quiero tanto. Tú lo sientes, ¿verdad? No está en las palabras, no tiene nada que ver con decirlo, con buscarle nombres. Dime que lo sientes, que no te lo explicas pero que lo sientes, ahora.

viernes, 6 de julio de 2012

"Duerme bien mi niña que yo te estoy siempre mencionando, no me sueltes ahora, solo mantenme asi aunque solo sea una hora. Si tan solo tuviera mas tiempo para poder amarte en el silencio de mi interior, hacerlo con todo el furor que guarda el templo edificado para ti yaciente en mi alma. Solo quedate con calma, no temas mas yo te cuidare y no te olvidare, eres mi amor primero..."



Forever <3

miércoles, 30 de mayo de 2012

El amor.

La vida es una acumulación de buenos y malos ratos. No podemos ser felices todo el tiempo, tampoco desdichados. Pero por el famoso "todo vuelve", por cada cagada que alguna vez nos mandamos, pagamos después.

La historia de mi vida es simple. Siempre fui una nena consentida por todos, hasta el día de hoy. Por tanto caprichosa. Se podría decir que soy como los gremialistas que cuanto más les das, más quieren. Así es como nunca estoy conforme y la vida me lo cobra sacándome cosas, para enseñarme que no todo lo que quiero es lo que necesito.

El secreto, a fin de cuentas, es el amor. El amor es la respuesta al 90% de los males y alegrías de la humanidad.
El amor correspondido nos genera felicidad, multiplica el afecto en todos los aspectos de nuestra vida, nos hace mejores personas.
El amor no correspondido nos hace infelices, nos pone feos y nos opaca la vida. Esa lucecita que brilla en nosotros es el amor, y cuando lo "perdemos", nos apagamos con él.

Pero, realmente perdemos el amor? Es difícil pensar que no, pero en verdad nunca lo perdemos. El amor no es sólo el de una pareja, aunque es el más volátil; es también el de la familia, los amigos, las mascotas (por qué no?)

Siempre estamos rodeados de amor y deberíamos entenderlo de una vez por todas. Mientras tengamos amor no estamos solos, así que nunca lo estamos. A veces creemos y sentimos en lo más profundo de nuestro ser que nos abandonaron, pero es sólo una enseñanza de la vida, que busca que valoremos todo lo que tenemos en vez de aferrarnos a todo lo que nos deja atrás.

Valoremos y vivamos más. El presente es todo lo que tenemos. Apoyemos a nuestros seres amados que no hay nada más lindo que recolectar compañeros por y para la vida.

El amor es la respuesta. Por y para siempre.


Te amo.
No. No me hables de miedo si nunca te sentiste sola. No me hables de miedo si nunca te sentiste abandonada por cada una de las personas a tu alrededor. No hables de miedo si nunca lloraste horas y horas hasta quedarte sin lágrimas. No me hables de miedo si nunca temiste que todo eso te vuelva a pasar de un momento a otro.
No. No quiero escucharte hablar de miedo si nunca sufriste por tu salud. Y por la salud de una de las personas que más amás en este mundo. No hables de miedo si nunca sentiste ese vacío inmenso en el pecho por si ese abrazo que tanto necesitabas no llegaba, o llegaba por la mitad.

Tampoco me hables de felicidad si nunca viviste todo lo anterior en un mismo día, pero ese abrazo llegó y calmó en un segundo todo el malestar de las horas pasadas.


Lets make this lasts forever.

jueves, 17 de mayo de 2012

Quién dijo que la gente cambia? Quién dijo que la vida enseña? Estamos condenados a cometer los mismos errores una y otra vez, a amar y a actuar de la misma manera, a decir las mismas cosas.
Vamos por la vida envejeciendo sin madurar, arriesgándonos a amar sin aprender, mirando atrás mío y atrás tuyo.
Vamos por la vida sufriendo de antemano, con miedos, con presiones, tratando de guardar todo el llanto que queremos soltar, haciéndonos los fuertes.
A veces valoramos y a veces sólo nos quejamos de no haber conseguido lo que queríamos, o de haber conseguido la mitad, sin disfrutar la otra porción que nos costó alcanzar.
Mil veces decimos y pensamos que vamos a ser diferentes, pero no lo somos. Seguimos cometiendo las mismas cagadas que ya cometimos, y somos plenamente conscientes. Y no nos importa.
Vamos por el mundo criticándolo. Opinando sobre todo lo que vemos y escuchamos cuando simplemente deberíamos agradecer que estamos vivos, para ver y escuchar lo que nos rodea.
Criticamos el mundo porque es lo que sentimos que el mundo hace con nosotros. No nos valoramos a nosotros mismos y creamos un personaje a la defensiva, duro, intocable. Pero por debajo del personaje se encuentra la personalidad, donde se guardan los verdaderos sentimientos, las verdaderas emociones, los miedos, los castigos. La personalidad es conocida por muy pocos.
Buscamos alejarnos de todo y nos quedamos.
Somos felices de a ratos pero antes de darnos cuenta estamos llorando de nuevo.
Soñamos y proyectamos a futuro, solos o acompañados, aunque en verdad estamos siempre solos.
Sufrimos y dudamos hasta que la persona indicada nos abraza o nos dice las palabras justas. Así recuperamos fuerzas para ser nuevamente felices de a ratos hasta que nos cansamos de recibir golpes y críticas, volvemos a llorar, volver a recibir fuerzas de unos pocos, y así sucesivamente.
La gente no cambia ni aprende, aunque sí entiende que debería hacerlo, pero no le importa.


martes, 15 de mayo de 2012

Ei vos! Sí, vos. Sos pelotuda?! Qué te falta ahora?!

Qué me falta? Por qué tantas ganas de llorar? Qué me sobra?

"A veces perdemos todo lo que necesitábamos por estar pendientes de todo lo que queríamos."

No otra vez.

viernes, 11 de mayo de 2012

En la vida hay sólo dos clases de personas, las que valen la pena y las que no. Ojo, una persona copada no  necesariamente vale la pena. No se trata de personalidad, se trata de actitudes, de valores. Podés ser la persona más divertida del universo, pero si sos una conchuda constante o un gran hijo de puta, no valés la pena, ni siquiera por un rato. 

Si te metés donde no te llaman, no valés la pena. Si hablás sin saber de quien no te corresponde, no valés la pena. Si leés el celular de la persona que tenés al lado, no valés la pena. Si te agradan los wachiturros y las palomas, definitivamente no valés la pena (?) 
Si no apreciás a las personas que te rodean, si no las cuidás por lo que son o lo que fueron, no valés la pena. Si te esforzás por permanecer en un lugar donde no tenés que estar, perjudicando a esas personas importantes, agotando recursos que rozan lo patético, no valés nada.

Para valer la pena hay que conocer límites, porque tu libertad termina donde empieza la del otro. Para ser una de esas personas que vale la pena se necesita respeto, gentileza, y sobre todo ubicación, para poder situarte en el lugar del otro, y saber que tus decisiones no afectan sólo tu vida. 

El amor vale la pena. Y vos también, por eso estoy acá. 


Que el pasado nos persiga, pero no nos va a alcanzar.


miércoles, 11 de abril de 2012

Mujeres que aman demasiado

(...) "A menos que tengamos autoaceptación y amor propio, no podemos tolerar que nos "conozcan", porque sin esos sentimientos no podemos creer que somos dignas de ser amadas tal como somos. En cambio, tratamos de ganar amor dándolo a otra persona, siendo maternales y pacientes, sufriendo y sacrificándonos, proporcionando una vida sexual excitante o cocinando maravillas, o lo que sea.
Una vez que la autoaceptación y el amor propio empiezan a desarrollarse y arraigarse, entonces estamos listas para practicar conscientemente el solo hecho de ser nosotras mismas sin tratar de complacer, sin actuar de maneras calculadas para ganar la aprobación y el amor de otros. Pero el hecho de eliminar la actuación, si bien es un alivio, también puede asustarnos. Cuando nos mostramos como somos en lugar de actuar, nos invade una sensación de torpeza y vulnerabilidad. (...) Al principio, el hecho de dejar de actuar nos hace sentir heladas. Cuando ya no estamos dispuestas a hacer las maniobras calculadas para producir un efecto determinado, hay un período de tiempo durante el cual sufrimos por no saber qué hacer hasta que nuestros impulsos genuinos de amar tengan oportunidad de hacerse oír y sentir para afirmarse.
Renunciar a las viejas estratagemas no significa que nunca nos acerquemos, nunca amemos, nunca atendamos, nunca ayudemos, nunca tranquilicemos ni estimulemos ni seduzcamos a nuestra pareja. Pero con la recuperación, nos relacionamos con otra persona como expresión de nuestra propia esencia, no porque tratemos de obtener una respuesta determianda o de crear un efecto o de producir una modificación en él. En cambio, lo que tenemos para ofrecer es lo que somos de verdad cuando no nos escondemos ni calculamos, cuando estamos sin disfraz y sin maquillaje.
Primero debemos vencer nuestro miedo a sentirnos rechazadas si permitimos que alguien nos vea de verdad, nos conozca de verdad. Luego debemos aprender a no sentir pánico cuando todas las fronteras emocionales ya no estén en su lugar, rodeándonos y protegiéndonos. En el áerea sexual , esta nueva calidad de relación no sólo requiere que estemos desnudas y vulnerables físicamente, sino también emocional y espiritualmente desnudas y vulnerables.
¿Qué hace que el riesgo valga la pena? Sólo cuando nos revelamos de verdad podemos ser amadas de verdad. Cuando nos relacionamos tal como somos, a partir de nuestra esencia, entonces si nos aman, aman nuestra esencia. Nada es más valorable en un nivel personal y más liberador en una relación. Sin embargo, cabe destacar que esta clase de comportamiento de nuestra parte sólo es posible en un clima libre de miedo, de modo que no sólo debemos vencer nuestros propios miedos a ser genuinas sino también evitar a las personas cuyas actitudes y conductas para con nosotras nos produzcan miedo. (...)
Lo que sucede a menudo con la recuperación es que, a medida que cambian nuestros patrones de relación, también cambian nuestros círculos de amistades y nuestras relaciones íntimas. (...)
En resumen, la recuperación le cambiará la vida en más formas de las que yo pueda predecir en estas páginas, y a veces eso le resultará incómodo. No deje que eso la detenga. El miedo a cambiar, a renunciar a lo que siempre hemos conocido, hecho y sido, es lo que previene nuestra metamorfosis hacia un yo más sano, más elevado y de un amor más genuino.
No es dolor lo que nos retiene. Ya estamos soportando niveles alarmantes de dolor sin perspectivas de alivio a menos que cambiemos. Lo que nos retiene es el miedo, el miedo a lo desconocido."



Estracto del libro "Las mujeres que aman demasiado."

lunes, 2 de abril de 2012

Dulce Espera

Llega un momento en la vida en que debemos bajar un cambio y reflexionar. Dicen que no es bueno mirar atrás, pero una vez cada tanto es útil hacerlo, para tener un balance de los cambios.
Reflexiono sobre mi vida y sobre lo poco que sé de vidas ajenas, de personas que me rodean. La conclusión es que llevamos décadas esperando.
Cuando somos chicos esperamos que llegue nuestro cumpleaños. Esperamos que llegue Pascuas. Esperamos que lleguen Papá Noel, los Reyes Magos y el Ratón Perez. Esperamos con ansias los regalos, los juguetes, para que se nos rompan o nos aburran a los 15 minutos de recibirlos. Esperamos.
Pasan los años y esperamos dejar la primaria. Queremos ese uniforme de los chicos grandes para convertirnos en uno de ellos. Esperamos ser grandes pero no esperamos las responsabilidades.
Ya somos "chicos grandes" y en la secundaria esperamos el amor. Lucimos con orgullo ese uniforme horrible que nos queda pésimo, mientras esperamos llamar la atención de Cupido y sus flechitas. Cuando finalmente aparece ese sentimiento muy parecido al amor esperamos que no termine. Esperamos que no cambie nunca, aunque sí esperamos que muchas personas lo hagan.
Esperamos que por algún milagro nos aborde la voluntad de empezar la dieta el lunes, de inscribirnos en ese curso o carrera que nos da miedo, de tomar esas clases de baile que no tomamos porque pasaríamos vergüenza con los dos pies izquierdos que tenemos. Esperamos la independencia pero queremos una mamá portátil que nos salve la vida.
Esperamos y esperamos.
Quisiéramos no esperar más, pero no lo logramos. Esperamos ese trabajo que no nos deje tan terriblemente justos a fin de mes. Rogamos aprobar esa materia y abrazar a ese profesor hijo de puta que te hizo la vida imposible, pero que prácticamente te donó el 4 (cuatro) para no verte nunca más. Estamos pendientes de ese llamado que no vamos a recibir. Esperamos ver otra vez la sonrisa de esa persona que no nos va a volver a llamar.
Seguimos esperando el amor, constantemente. Esperamos que "esta vez sea diferente", que sea la persona indicada, que la amistad y el amor duren para siempre.
Entre tanta espera vamos conociendo gente nueva, viviendo experiencias cada vez más profundas y aprendiendo que todo lo que esperamos que cambie depende de nosotros. Depende simplemente de estudiar más, de trabajar más duro, de perder la vergüenza, de confiar en uno mismo y de amarse a uno mismo. Depende de lo que damos, y no de todo lo que recibimos o esperamos recibir.
Cuando llegamos a esta conclusión decidimos no esperar más. Decidimos tomar las riendas de nuestra vida y hacer toooooodo eso que por tantos años esperamos. Casi casi terminamos la facultad, tenemos un trabajo estable, comenzamos esas clases de baile y encima no nos va tan mal como creíamos. Programamos un viaje laaaargo y lejos para conocernos mejor internamente y a la vez, desapegarnos de todo lo que conocemos.
Pero además, encontramos lo más parecido a "la persona ideal" que pudiéramos imaginar. Esa persona que nos llena y complementa por todos lados, que nos hace un mejor ser humano.
Cuando parecía que todo iba viento en popa volvemos a esperar. Esperamos que la distancia durante nuestro viaje no arruine ese vínculo tan preciado; esperamos que estemos tomando la decisión correcta; esperamos que al regresar todo sea igual que antes aunque sabemos que no va a ser así, porque también esperamos cambiar nuestra vida durante el tiempo que estemos lejos.
Nos pasamos la vida esperando muchas cosas. Cosas y situaciones que probablemente no sucedan mientras las esperamos, sino que suceden (en algunos casos) cuando menos lo imaginamos.
Entre tanto que esperamos se nos fue la infancia, se nos fue la adolescencia, se nos fue la juventud y cuando volvemos a mirar atrás esperamos poder retroceder el tiempo y no haber esperado tanto, y simplemente haber disfrutado más.

viernes, 30 de marzo de 2012

Aflojale a lo cursi, querida.

Hoy no me voy a poner cursi. No, hoy no voy a empezar con un "había una vez" y terminar con un "vivieron felices por siempre". No hay una bella durmiente en esta historia, ni tampoco un príncipe que llega con su caballo alado a despertarla. Tampoco voy a hacer mención de una bruja mala, negra y fea, porque no tiene importancia.
Hoy no me voy a poner cursi porque no quiero decirles que lo amo. No quiero escribir sobre su manera de hablar, ni sobre cómo lo pienso todo el día. No, no quiero hacerme cargo de mis sentimientos ni de mis emociones. Quiero seguir impune por la vida con mi corazón inerte, pero sano.
No me voy a poner sentimental hoy. No quiero tener que recordarles que yo no sentía nada, que incluso rodeada de gente estaba sola. No tengo planeado admitir que eso cambió por él. No hay bella durmiente en esta historia porque no era yo quien dormía, sino mis sentidos. Él los despertó, pero que quede entre nosotros.
Hoy no van a leer acá sobre amor. Porque el amor debería ser fácil, fluido, pero no lo es. Las personas no deberían cuestionar "por qué amás tan rápido?", no deberían limitar el amor. Deberían cuestionar "por qué odiás y juzgás tan rápido?", no suena más lógico?. Aún así el amor no es fácil, y tampoco es sencillo describirlo, así que sólo por hoy me voy a ahorrar mis intenciones de lograrlo.
Creo haber dado razones suficientes para no hablar cursilerías el día de hoy, pero falta la más importante: todavía no creo que exista el "vivieron felices por siempre", "happily ever after", "hasta que la muerte los separe". Pero si tengo que elegir una sola cosa tierna para decir hoy, es que con él estoy dispuesta a comprobarlo. Por favor, que eso también quede entre nosotros, porque hoy prometí no ponerme cursi.

jueves, 29 de marzo de 2012

Remind yourself that it's okay not to be perfect.

Veintidós. Hace casi veintidós años nacía yo. Nací con un diente, les conté? Dicen que era tierno, pero a mamá le causé problemas. Bueno, a las tetas de mamá les causé problemas. Me lo sacaron a los pocos días porque la mordí, con sangre incluida, mientras tomaba la leche y no me quería soltar, yo quería mi teta.
Conflictiva desde el nacimiento, eso explica muchas cosas.
Los años pasaron y con ellos no sólo siguieron los conflictos, sino que se sumaron inseguridades. Algunas veces me llevo el mundo por delante y otras quiero correr a los brazos de mamá para que me diga que todo va a estar bien. Algunos días soy una superheroína y otros días lloro hasta por las dudas.
Pero a ver, chicas, pensemos lo siguiente: No tenemos suficientes "defectos" como para encima ser inseguras? Ese es el peor defecto de todos. Unos kilos de más o de menos? Una nariz pronunciada? Ojos saltones? Pelo pajoso? Dientes torcidos? Boeeeeeno, no es la muerte de nadie. Recuerden que siempre pero siempre hay un roto para un descosido.
Ser inseguras, en cambio, no queda ahí, sino que nos lleva a muchas otras cosas, como por ejemplo: hinchar las pelotas. Ser inseguras saca lo peor de nosotras y nos convierte en máquinas de mandarse cagadas. Eso en el mejor de los casos, en el peor de todos, nos aisla. Ahí es cuando se suman las soledades.
Ustedes dirán: "callate pelotuda, si sos la más insegura de todas." Y tienen razón. Pero es sólo cuestión de tiempo para que se me graben mis propias palabras.


Siempre hay un roto para un descosido.

lunes, 26 de marzo de 2012

Te quiero-Te amo.

Esa sutil diferencia entre querer y amar.

Querer es compartir el desayuno, amar es ligarte las tostadas más quemadas para que él coma las mejorcitas.
Querer es salir a pasear, amar es salir a pasear y aguantarte el pis para verlo andar en skate mientras "leés" un libro.
Querer es andar en skate juntos, amar es que te ataje antes de la caída, que corra al lado tuyo sólo por las dudas mientras aguanta también el pis.
Querer es dormir juntos, amar es despertarte y verlo dormir.
Querer es irse juntos de vacaciones, amar es cancelar/postergar planes propios para que el otro se pueda ir de vacaciones.
Querer es ir a un recital juntos, amar es cancelar/postergar planes propios para que el otro pueda ir a un recital importante.
Querer es pasarla bien juntos, amar es disfrutar de ser transparentes el uno con el otro.
Querer es dar un abrazo, amar es perderse en ese abrazo.
Querer es decir "te quiero", amar es decir "love u" para suavizar el impacto.
Querer es decirlo, amar es demostrarlo.

lunes, 19 de marzo de 2012

Ciencia pura.


Cuando uno está enamorado se pone medio boludo, debo insistir. Pero es el estado de boludismo más lindo conocido hasta el momento. No entiendo a la gente que dice "enamorarse es una cagada", en mi opinión sentir amor es maravilloso.

El grado de boludismo varía de acuerdo a la persona. La relatividad de éste fenómeno se debe, principalmente, a las vivencias experimentadas por los involucrados. Por ejemplo:
En el caso de la mujer, el boludismo es proporcional a la conchudez previa, y ésta última es, a su vez, proporcional a los daños provocados en su corazón.
En el caso del hombre, el boludismo es proporcional al uso que quiera darle a su miembro. Dicho uso es relativo a sus ganas de ocasionar daños en los corazones femeninos.
En resumen, la mujer que ha sufrido demasiado del corazón presentará un cuadro leve de boludismo para evitar exponer el ya mencionado músculo a nuevos daños. El hombre que quiera exponer a su miembro a múltiples experiencias, también presentará un bajo nivel de boludismo.
Sí y sólo sí, se encuentran una mujer cansada de su conchudez y un hombre con el pito abrumado, se producirá el fenómeno en todo su esplendor.

Si hay un Dios en algún lado quiero agradecerle por haber puesto en mi camino a un borrego con el pito "abrumado" más lindo del mundo, que me hace de a poco dejar atrás mi conchudez y entregarle cada día un pedacito más de mi corazón.
-Viste que tengo un montón de líneas entrecortadas en las manos?
-"Síp, pero ésta larga soy yo. La que se atraviesa con las otras como se atraviesa en todos tus planes, y al final, se une a una sola."

El amor es un camino de ida y yo estoy enamorada. Estoy deseando que todos mis planes y los tuyos se conviertan en nuestros, y finalmente nuestras "líneas" se unan.
Estar enamorada es tener y sentir amor. El amor es, entre otras cosas, la felicidad que te produce ver a otra persona feliz. Amor es entregar uno a uno los pedacitos que nos conforman y dejarse armar, dejarse completar. Amor es sentir que esa persona te salva la vida.

Admito abiertamente que estoy enamorada porque no sólo siento mariposas en la panza, sino que mi cabeza es una especie de película constante, que reproduce los mejores recuerdos con él. Disfruto tanto de su compañía que el tiempo se me escapa y en sus brazos, al parecer, se respira mejor. Lo admito simplemente porque no podría no hacerlo con la baba que me cuelga cada vez que lo miro con cara de idiota.


"Cuando Dios quiere salvar a un hombre, le envía amor."

Gracias.

martes, 13 de marzo de 2012

Nunca me faltes.

Qué haríamos sin vos? El mundo sería una miseria en tu ausencia. Las personas caminarían tristes en una vida sin sentido. Los colores se apagarían.
Nadie disfrutaría de la naturaleza, de los nacimientos, de los amigos, de la familia. No existirían demostraciones de alegría, ni de felicidad, ni de amor.
No habría buenos dolores de panza, diversión, buen humor. Las personas se tomarían todo a mal y no disfrutarían ni de sí mismos!
Cómo pondríamos fin a las lágrimas y al dolor si no te tuviéramos a vos? Cómo se iluminarían los rostros si nos faltaras?
El día que todos entendamos lo esencial que sos el mundo sería un lugar mejor.

Qué haríamos sin vos, Risa querida? No quiero vivir si no te tengo conmigo. Nunca me abandones.

lunes, 12 de marzo de 2012

-Hola, qué tal? Quería un kilo de confianza y otro de paciencia. También dame medio de ternura y un cuarto de amistad. Ah mirá, dame de esas bolsitas de cuidado y respeto, son fundamentales.
-Apa, algo importante hoy? Qué estás preparando?
-Una relación.
-Y amor no vas a comprar?
-Na, el amor ya lo tengo.

(Qué me hiciste? En qué momento y desde qué lugar te convertiste en lo que sos para mi? Desde cuándo acepto que me tiemblen las rodillas por alguien? Hace cuánto no me pierdo en la mirada de nadie? Con el derecho de quién te metiste en mi cabeza? Cuántas veces más voy a escribir por vos? Cómo voy a hacer para dejarte ir?)

Estoy cocinando, como querías. Te estoy preparando una rica relación, que espero pueda satisfacerte, sea abundante y represente un momento memorable. Que la cena se extienda todo lo que sea posible, y cuando se acabe...no sé qué esperar de ese momento.

Como dije, el amor ya lo tengo. Desde el principio, no muy lejano todavía, pero no por eso memos importante. Qué me hiciste? Cómo lo ganaste? No me importa, ya es tarde. Te quiero.

Puedo, má?

"Qué querés ser cuando seas grande, Sabri?" Mmm, quiero ser veterinaria, má. También maestra, puedo ser las dos cosas? "Podés ser todo lo quieras ser, hija."

Eso fue lo que realmente pasó. Ésto es lo que hubiera deseado que pase:

"Qué querés ser cuando seas grande, Sabri?" No quiero ser grande, má. Quiero ser así siempre, puedo? "Crecer vas a crecer aunque no quieras, pero podés ser grande sin dejar de ser una nena, qué te parece?" Siempre voy a ser tu nena? "Por supuesto, Sa."

Ser un niño siempre. Ser ingenuo para sorprenderse de las cosas pequeñas de la vida y disfrutarlas sin límites. Ser un niño para no desconfiar de nadie salvo que el "instinto" diga lo contrario. Ser un niño para respirar amor y para no tener expectativas de nada ni nadie.
Quisiera seguir siendo un niño para que los enojos sean simples berrinches que se pasan en pocas horas. Para que no haya lugar para rencores ni venganzas.

Quién pudiera permanecer como un niño! Para no sufrir. Para no convertir al amor en dependencia, para no tener preocupaciones, para que el objeto, la imagen o la palabra más simples nos llenen de felicidad.
Para siempre tener un abrazo en donde llorar.

Seamos más niños. Disfrutemos más y quejémonos menos. Amemos más y discutamos menos. Agradezcamos más y pidamos menos.

Seamos más niños, seamos más libres.

jueves, 8 de marzo de 2012

Iba a escribir algo re cursi pero para no ponerme goma lo resumo a ésto: te das cuenta de que estás al horno cuando lo que más querés twittear es sencillamente un "<3".

miércoles, 7 de marzo de 2012

Mi casa es un desastre, mi vida un poco más.


"Mi casa es un desastre, mi vida un poco más." Es así. "Desastre" y "caos" son palabras que me definen muy bien. Por empezar, mi habitación puede confundirse tranquilamente con un campo de batalla. Soy incluso de esas personas que se van de vacaciones y gozan de dejar todo tirado sin una madre que reclame a diario un poco de orden.
Si dependiera de mí probablemente moriría. No sé lavar, planchar, ni cocinar. De hecho no sé qué lugar le corresponde a cada cosa en la cocina. Siempre digo que el problema es que me cambian todo de lugar, pero no, la verdad es que nunca supe la ubicación.
Soy una consentida por todos. A los casi 22 años siguen llamándome "la princesa de la familia" mientras mi primita de 10 mira de lejos hirviéndole la sangre.
La pereza normalmente me supera. Es cierto que hay personas que nacieron cansadas, yo soy un claro ejemplo de eso. Muchas veces soy negativa, herencia de papá, pero lucho internamente para cambiarlo. Eso me consuela.
Pero sobre todas las cosas, soy una conchuda. Me hicieron una conchuda. Algún que otro complejo, conflictos familiares, y hombres. Enfaticemos en hombres.
Ser conchuda implica liberación por un lado y represión por el otro. Nos liberamos porque no dudamos en mandar a la mierda al primer idiota que se nos cruza; y es represión de todo ese amor que ruega por salir, que pide a gritos que te dejes de joder y seas "buena" de nuevo.
Todas somos conchudas en algún momento de la vida, y en ese lapso nos ponemos divinas y queremos romper corazones. Lo disfrutamos. Pero cada tanto, gana el amor. Viene Cupido a proponerte muchas cosas que te dan miedo, te pone en frente a una persona que la mirás torcido porque sabés cómo pueden terminar las cosas. Pero vos y ese amor reprimido agarran la flechita que Cupido te entrega cagándose de risa. Así es como de ser una conchuda pasás a ser una boluda.
Una boluda que va por la calle con cara de boluda, que le dice "buen día" hasta a las palomas que días atrás odiaba profundamente, que no entiende de qué sonríe, pero sonríe. Y la boluda no entiende qué le pasa porque ya no se acordaba lo que se sentía ser una boluda, o no quiere acordarse. Ser una conchuda siempre es más fácil.
De pronto, de pensar en tu ex pasaste a pensar en alguien nuevo. Tan repentinamente como tu novio pasó a ser tu ex, más o menos. Lo mejor y lo peor, es que esa persona piensa en vos, y ahí cagamos todos. Derrochás, escupís, se te escapa de las manos toda esa ternura acumulada y reprimida durante el período de conchudez y nadie te para. Vos de a ratos te detenés a pensar las cagadas que te estás mandando y en los quilombos en que te estás metiendo, pero ya es tarde. Ya sos una boluda y lo sabés. Lo sabés y por alguna razón no te interesa. Sos "feliz".
Yo, después de cuatro meses de conchuda estoy convirtiéndome en boluda. Estoy dejando atrás el dramatismo característico de la conchudez para empezar a mirar con cariño a esas palomas que fastidian a la hora del almuerzo en la plaza. Con todos los miedos pertinentes estoy por saltar, me arriesgo.
Vamos, quiero arriesgarnos a hacernos felices.

miércoles, 22 de febrero de 2012

Si le pregunto a él qué lunar recuerda de mi respondería: "el que tenés ahí abajo". Si te hago la misma pregunta a vos, contestarías "el que tenés al costadito, tenés uno en la axila también"
Cuando necesité a alguien no estuvo él, estuviste vos. De hecho necesité a alguien por la ausencia de él.
Cuando "corro riesgos" es tu mensaje el que llega preguntando si estoy bien, no el de él.
Descubro que cada vez hay más canciones que puedo dedicarte. Aunque por ahora, en ésta sigue ganando él.


A veces te sigo necesitando. Sé que estás, lejos pero estás.

martes, 7 de febrero de 2012

Siempre termino escribiendo sobre vos. Hace tres años que termino escribiendo sobre vos. Todo este tiempo fuiste el único. Bueno, pasaron varios, pero ninguno me marcó. Cuando finalmente apareció ese alguien tan (o más) importante que vos, volví a sufrir, todavía estoy tratando de salir de ese dolor.
Las cosas que vos hiciste por mi en estos últimos días no las hizo nadie, espero sepas que realmente valoro todo lo que me diste. Pero justamente por eso no puedo ser yo quien te lastime, no más.
Te voy a extrañar, sí. Te quiero, sí. Me encantaría tenerte en mi vida, sí. Pero ofrecerte compañía, una pseudo amistad es lo mismo que tomarte el pelo. Que hoy no me pase lo mismo que a vos es una ironía. Intercambiamos roles, dimos vuelta la situación de 3 años atrás. Karma dicen, para que vos aprendas lo que yo pasé y para que yo entienda tu desición en su momento.
Aunque no me necesites, estoy. Aunque no me creas, sos importante para mi. Aunque quieras olvidarme, yo no te voy a olvidar. Nunca pude, nunca podré.

Si hoy escribo ésto es porque sé que vas a leer. Si dejo de escribir es por la misma razón.

Me despediste con un hasta nunca. Yo te despido con un hasta siempre.

lunes, 6 de febrero de 2012

¿Te extraño o estoy aburrida? ¿Quiero verte o quiero que me veas? ¿Te recuerdo o quiero que me recuerdes? Te busco, te encuentro, pero ¿quiero que me encuentres?


"No te merezco" Entonces mereceme y encontrame. O no, mejor dejá, puedo sola.




Remember I'm forever when it comes to you.
Simplifiquemos los hechos: derrocho pelotudés.

Fin de la historia.






P.D: I felt just like I used to feel.

jueves, 26 de enero de 2012

Thoughts

So, if I look back to us I see pain. I can even feel the pain you caused me. But, if I take a deeper look I see you. I see a better man, I see a man that I don't really know why, but completes me.
Once a read a book about a love story. She was in love with two different guys but she had to pick one. She was confused about her feelings but she made up her mind and picked. She picked well, REALLY well, of course. But that was just a book. The thing is that those both guys where soulmates for her, BOTH.
After reading that I read this magazine, in this case about LIFE, not love. This very spiritual magazine published an article about soulmates, and I knew at that moment that I was looking at the truth. It said that we all have soulmates, not one, maybe two, three or four. We are souls that travel along the universe, the time, the lifetimes, just looking for that another soul that really makes us happy. The person that carries that soul could be a friend, a parent, a couple. You see him/her and it's like watching a very interesting tv show about his/her life and what he/she can do with yours.
Unfortunately, this doesn't mean that those souls are staying together. This kind of bond is passionate, and because of that it's complicated.

Thinking about this I reached to this conclusion: You are one of my soulmates, that's why is hard for me to let you go everytime I have to. BUT unfortunately, we are not made to be together, at least in this moment or lifetime.

I guess I was right a few years ago saying that you may be the one I can't forget.

miércoles, 18 de enero de 2012

Hace cuánto tiempo decidí haberte superado? Hace cuántos meses/años atrás dejé de pensar en vos? Cuántas veces te odié, cuántas veces te amé, cuántas veces te quise, cuántas veces te perdoné?
Cuántas veces te necesité?
Cuántas veces dije tu nombre sin querer?
Te superé?

Mil cosas por decir y no salen las palabras. Cómo explicarte lo que realmente me pasa? No se trata de escapar, se trata de no lastimar. Te quiero, siempre lo hice y siempre lo haré. "El amor verdadero nunca termina", y yo sé que te quise de verdad.

Soy cagona? Sí. Tengo miedo? Sí. No quiero sufrir más. Ya sufrí por vos, y sigo sufriendo por otro pelotudo. Pero eso no significa que no vea todo lo que hacés por mi. Cosas que nadie más haría. Actitudes que valoro.

Desde el principio aclaré que te quiero y que te necesito. Me hacés bien. Pero también dejé en claro que no estoy bien (se nota mucho) y que me cuesta el estar bien con mi alrededor. Vos llamalo miedo o como quieras, yo lo llamo "mecanismo de defensa". Mi estrategia para no salir lastimada. Triste? Probablemente lo sea; patético también.

Mi cariño por vos nunca se va a terminar, fue demasiado real como para olvidarlo. Te bancaste muchas y (casi) siempre que te necesité estuviste. Gracias.

Vos creés que huyo, que me voy en unos meses escapando de todo lo que me hace mal, y sí, es probable que en parte sea eso. Pero este viaje fue planeado mucho tiempo antes de enamorarme de nuevo de otro pelotudo, antes de sufrir por ese pelotudo. Fue planeado para crecer, y así será.

Llamaste anoche para decirme que no me querés perder. Yo tampoco quiero perderte. Es egoísta mantenerte a mi lado porque es probable que no pueda darte lo que buscás. Estoy rota. Estoy en el proceso de recuperación. Tu compañía me hace bien, sentirme querida me hace bien, sentirme menos sola. Egoísta, no?

Me encantaría que entendieras porqué no me gusta "hablar de estos temas". Así terminamos, ves? Separados, sufriendo. Al menos cuando estamos juntos la pasamos bien. Sé que podríamos pasarla mejor, pero eso es cuestión de tiempo (o no).

Jamás quise lastimarte y mucho menos vengarme de vos. No estoy disfrutando este momento como seguro creés que hago. La "Sabri" que conociste sigue acá, en algún lado, luchando por salir, por volver. Y esa "Sabri" jamás te lastimaría. Dije e hice cosas que no debí y pido disculpas, no quiero justificarme pero mi vida es un desastre, un caos, y entre tanto quilombo alguna(s) cagada se me escapa.

Si acá se termina y no te veo más, gracias. Gracias por todo.

jueves, 5 de enero de 2012

Que sí, que no, te quiero, te extraño, no hoy no te quiero ver, dejame pensarlo, hacé ésto, hacé lo otro, perdoname, te perdono, te quiero, no te soporto, te quiero un poco más, tengo ganas de matarte, me voy, te vas.



Que sí, que no, que te apoyo, que no, que me mando cagadas, te mandás cagadas, muffin, no muffin, te quiero, no te quiero, te quiero, no te soporto, te defiendo, lo defiendo, te pongo los puntos, no te soporto, me voy, te vas.


Entiendo, no entiendo, los quiero, no los soporto, los quiero de nuevo, los mando a cagar, estoy bien, estoy mal, pienso en vos, pienso en él, te quiero a vos, lo odio a él, lo recuerdo, te recuerdo, me olvido, me olvido, me olvido, me voy.


The story of my life. The end.